lunes, 19 de diciembre de 2011

ADMITIMOS MENTIRA, COMO ANIMAL DE COMPAÑÍA

ADMITIMOS MENTIRA, COMO ANIMAL DE COMPAÑÍA

Tito Ortiz.-

Hubo un momento histórico en que la policía, contrató a delincuentes convictos y confesos para que les enseñaran a conducir en situaciones extremas. Persecuciones, escoltas, blindados, o sea, que tuvo que recurrir al “vaquilla” de turno, para saber como se hacía un puente a un coche para robarlo, y como se hacían trompos para despistar a los maderos, y eso fue un éxito. Desde entonces - que vestían de marrón - las cosas no han cuadrado nunca. Baste recordar, que el fichaje estrella que el Partido Popular hizo para ganar las elecciones, fue el padre de Mari Luz Cortés, gitano, analfabeto, en calidad de asesor de los populares para la reforma del Código Penal. Claro que después de discernir algún asunto familiar a tiros, Rajoy ya no quiso hacerse ninguna foto con él, y no sabemos como irá el informe de una criatura que, sin el Certificado de estudios Primarios, pretende enmendarle la plana a los magistrados de la Corte Suprema española. Porque la obra lo ha querido, ha hecho todo lo posible para acabar con otra Iglesia evangélica, pero no lo han conseguido, porque el padre de la niña asesinada, encumbrado a los cielos por los populares, en vista de que su iglesia no le “echaba cuentas “, ha terminado por inventarse y crear la suya propia. Eso es arte. Viva el pepé y la madre que lo parió, y a sus veedores, también, que ésta es la gentuza que tienen que fichar, para sacarnos de la crisis.

Es éste un hecho tan sólo comparable con el letrero que se ve en los estancos: El de, ¡Se prohibe fumar!. Que en casa del que vende el tabaco, mueve a chacota, que diría un ilustrado. Lo único que siento del padre de Mari Luz, es que tuviera un vecino mal nacido, que dio con un juez tontorrón que se fió de un psicópata, y lo dejó en la calle siendo un peligro público, pero eso no me impide discernir entre un patán, y demagogo, que no entiende de Patria, ni dios ni rey. Un “chanelaor” que toma por tontos a los payos señoritos, y se hace el mártir, pero a mi no, compadre. Que entre caló y caló, no vale la güena ventura. Lo tuyo es puro teatro, y no lo de Olga Gillot. Que yo nací en el Albayzín, me crié con los del Ave María y tenía Familia en Haza Grande y en el Sacromonte. A mí no me la das tú... “artista”. Yo estoy muy escaldado. Cansado está mi cuerpo de soportar como se les prohibe la entrada a los perros en las clínicas veterinarias, que es que ya no puedo más. Esto es tan sólo comparable con aquel capitán de barco que se mareaba. Dicen las malas lenguas que el del Titánic era de estos, y que por eso estaba en su camarote la noche que el iceberg hizo de las suyas, hace ya un siglo. Estoy hasta el gorro, de los que ponen a los “dionis” de turno, a vigilar la caja fuerte del Banco de España, algo de lo que en éste país tenemos grandes especialistas en todos los bandos, pues no hay que olvidar, que aquí pusimos a un Roldán, que no tenía el Graduado Escolar, a dirigir nada más y nada menos que a la mismísima Guardia Civil, y nos quedamos tan anchos, porque aquí, cuando decimos de equivocarnos, lo hacemos a lo grande, aunque falte para pan, oiga. Ésta ciudad tiene el único ayuntamiento del mundo, capaz como hizo hace algún tiempo, de poner una denuncia a un cuerpo de costaleros por ensayar en la calle, y conseguir que su semana santa sea –por el contrario - declarada de Interés Turístico Internacional, que ya tiene delito la cosa. La denuncia rezaba así: ...vehículo de tracción animal, que circula por la vía pública, de noche y sin luces de situación ó emergencia. Esa acta de infracción la tuve en la mano, y no se como no le puse un marco para la historia. Algo parecido ocurre con las bandas de música, denunciadas por hacer ruido mientras ensayan, pero cuya presencia se reclama desde la institución municipal, para cualquier acto que la casa organiza. También es histórico el hecho denunciado por la autoridad municipal, de aquel paso que se llevó por delante farola y letreros en la calle Salamanca, porque el ayuntamiento no los había retirado con la antelación debida, al paso de los cortejos del Domingo de Ramos. Esto me recuerda aquel concejal de pueblo costero, que pasado de copas se cayó de la moto, y no dudó en denunciar a su propio ayuntamiento, del que cobró suculenta indemnización, aludiendo a un bache en la calle, como causa del accidente. Espero que se sonroje al leer esto.

Ésta ciudad es capaz de poner a Carpanta, como vigilante de seguridad en el banco de alimentos, multar a un graffitero por “ensuciar” las paredes, y luego, patrocinarle una exposición con dinero público en institución oficial. Conozco algún paracaidista con vértigo, y un caballero legionario, que lleva años de baja por depresión, al no soportar el color verde del uniforme, o sea, un asunto cromático, como salta a la vista. Son granadinos los dos. Como las almas caritativas, que el otro día invitaron a champagne francés y caviar de Río Frío a mi perro, cosa que no me extraña, porque mi Duke, es de lo más listo y cariñoso, con decir que ladra por señas, para no molestar a los vecinos y que además, lo entiendan los sordos, con eso está todo dicho. Pero que conste, que lo del caviar al perro, aunque sea el mío, me parece un desperdicio. Es como decorarle el dormitorio a Serafín Zubiri, con los mejores desnudos de Marilyn Monrroe. A ésta sociedad hay que meterla ya de una vez, en un ente de razón, darle el poder a los indignados, y echar del país a los políticos. Hoy estoy sembrao... ¿no?